Cromatografía de papel sobre pigmentos de tinta - Directorio y Guía de los Mejores Colegios Privados y Universidades


Cromatografía de papel sobre pigmentos de tinta

Otro nombre rarísimo que  como futuros científicos tenemos que ir acostumbrándonos a escucharlo.
En realidad no es tan terrible son palabras griegas que a los científicos les encanta mezclar para que la gente normal no  les entienda ni J. Pero  al menos ya conoces una de estas: Grafía  que significa escribir, de  allí viene la palabra caligrafía, y también geografía  que significa escribir sobre la tierra ya que  Geos  significa (Ya lo adivinaste, ¡Muy bien!), tierra en  Griego.

Cromos  es la otra palabra y significa color. De modo que  si    ya las uniste, habrás descubierto que cromatografía  significa simplemente  escribir con colores, algo que nos  suena muy divertido, ¿Verdad?

Realmente eso es. Un científico ruso de comienzos del siglo pasado descubrió que si una línea de tinta coloreada en un papel, se moja, la tinta se corre y a menudo aparecen dos o más colores. Según como se hubiera fabricado esa tinta. Eso seguramente ya lo sabes porque cuántas veces se te ha mojado un trabajo  hecho con marcador  y se ha corrido la tinta y el profe te ha puesto mala nota. En realidad, no debería haberlo hecho, ya que  eso fue para los científicos, que suelen ser muy ordenados y no dejan que se les mojen sus carteleras, un gran descubrimiento.
Bueno, vamos a hacer nuestra primera cromatografía y vamos a investigar si las tintas de  nuestros marcadores están hechas cada color de una sola tinta o en realidad son una mezcla de varias tintas. Lo que vamos a hacer es colocar una serie de puntos de tinta  hechos con marcadores de distintos colores  sobre una  rayita cerca del borde de un papel. Sumergimos un extremo del papel en agua y como ya lo sabes, por amarga experiencia con algunos de tus trabajos, el agua comienza a correr por el papel por algo que llaman  capilaridad y disuelve  las tintas  corriéndolas y haciendo todo un desastre de manchas en el papel. Bueno. De eso se trata pero los científicos  le ponen muchos nombres raros y hasta matemáticos.

Necesitamos  algunos de nuestros frascos de compotas y papel de filtros para café o se toalla de cocina. Si no hay más puedes intentar con una hoja de papel de carta  o hasta de cuaderno, pero no es lo mismo porque están cubiertas de almidón y no son porosas, pero podemos intentarlo de todos modos.

Cortamos varios rectángulos de papel  de modo que midan unos dos cm menos  de la altura  y de ancho  alcancen a enrollarse hasta casi la  mitad del frasco que será una vez lo hayamos tapado, nuestra cámara cromatografía.   Una vez  verifiquemos que ajustan bien  con  tapa, a un cm de los bordes inferiores  de cada tira de papel, medimos  un cm  y hacemos una raya  con lápiz (No valen esferos ni micro puntas!) y a dos cm del extremo  y cada 2 cm  marcamos pequeños puntitos donde depositaremos las muestras. Cada tira la podemos marcar con un pequeño número  de acuerdo a la cámara cromatografía  donde la vamos a correr.  (¿Observan el lenguaje tan play de los científicos?) El papel es llamado  la “Fase estacionaria” y se requiere  un líquido que hasta puede ser agua, pero ellos lo llaman la “Fase móvil”.
Ahora colocamos en el mismo orden en todos los papeles puntos  de no más de dos milímetros de  diámetro  de puntitos hechos con los diferentes marcadores. Por  ejemplo, amarillo, azul, verde, rojo, morado, café y negro y una letra abajo  como la inicial de cada color  por si se nos  olvidan.
Podemos colocar en cada punto varios  gotitas de la tinta que corresponde  pero dejando secar.  También  los científicos  suelen  poner varias gotitas  de distintas tintas en  un mismo punto  para que se vean más colores.

Ahora a preparar el  “Eluyente” que es la fase móvil, o sea el líquido que vamos a poner en cada uno de nuestros frasquitos de compotas o sea las cámaras cromatograficas. Este  no debe subir de unos 5 mm y por ningún motivo  llegar al nivel de la raya donde están  las gotas de colorante.
Podemos  preparar, como hacen los científicos, varias  composiciones de eluyente  para ver cuál separa mejor. En un frasquito pondremos  solo agua, en el segundo por ejemplo solo alcohol, en el tercero  vinagre, en el cuarto  agua y alcohol, mitad y mitad, en el  quinto alcohol y vinagre, y  en el otro podría  ser  agua, con alcohol y vinagre. Lo bueno de ser futuros científicos es que podemos investigar.

Ahora introducimos  cada papel en el frasco cuidando que queden derechos  y la fase móvil  no toque las rayas de partida y dejamos correr el cromatograma como  llaman a la carrera de las manchitas de tinta subiendo por el papel. Hay que dejarlos quietos  pero cuando veamos que el frente del disolvente está  casi a un cm del borde superior del  papel, lo sacamos  y ponemos a secar al aire. Inmediatamente  con el lápiz se debe hacer una rayita en el punto  hasta donde llegó el solvente. Luego observamos que quedaron un montón de manchas. Pues bien, con el lápiz hay que marcar  su contorno y un punto donde calculamos que es el centro de la  mancha.
Ahora podemos escoger la tira donde  quedaron mejor  separadas las manchas y ese será el eluyente ganador que anotaremos en nuestro cuaderno de laboratorio

Ahora vienen las matemáticas. Para cada mancha de un color  se mide la distancia que recorrió desde el origen hasta el centro de la mancha y esa medida la dividimos por la distancia que recorrió el eluyente desde el origen hasta el  extremo que marcamos al  sacar el papel.
Esto nos da los valores RF  que son  específicos para cada sustancia en determinadas fases móviles y estacionarias. Es como la huella dactilar de cada sustancia.
Verifica por ejemplo los valores de un pigmento que no estaba formado por otros. Por ejemplo ¿el rojo. Calcula su valor RF. De pronto un adulto te ayuda o la calculadora del celu.

 

Bueno. Esperamos que estos experimentos te hayan divertido  mientras pasa la cuarentena y luego  vamos a publicar otra serie para que sigas siendo un futuro Científico.